Por favor,
abrazame fuerte, que mi corazón pueda traspasar nuestros pechos y se limpie en tu cuerpo.
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De niño le encantaba andar a pata coja, alzar los brazos al cielo e ir dando brincos, imaginense la vergüenza cuando aún a los treinta siga intentando escapar del sentido
1 comentario:
queda algo de sangre que poner a hervir amigo??
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